miércoles, 16 de noviembre de 2011

Sobre el Taller de Bufón


En el taller de Bufón se pretende que los participantes no "actúen" a ser bufones, si no, que se conviertan en bufones y jueguen a reirse de sí mismos para así burlarse del mundo.
El bufón es un ser libre de prejuicios y moral y por tal es capaz de navegar entre el bien y el mal, entre el cielo y el infierno, adentro y afuera. La imagen grotesca y burda del bufón es una duro golpe para el ego, de manera que si el participante es capaz de reconocerse y burlarse de lo que es, es posible que quede liberado de muchos de sus bloqueos impuestos por su entorno inmediato. El bufón invita a revelarse contra sí mismos para encontrar debajo de todas las capas del “carácter” su verdadera esencia como individuo.
 
Para abordar el bufón se parte de la confrontación personal amorosa para entrar en el campo de la psique del individuo y que éste reconozca a los otros como espejo de sí mismo, reconozca sus miedos, sus máscaras de protección del ego y tome el reto de burlarse de lo que lo sostiene como individuo psico-social. 
 
Con la idea de no dejar cosas fuera he decidido tomar todo lo que me llega y verterlo a un caldero mágico, estoy probando la alquimia de meter muchas de las cosas que he aprendido para transformar la mierda en buen abono, para transformar el plomo en llaves que abran puertas. Estoy experimentando mezclar en una gran cazuela el bufón callejero, el bufón de Lecoq, la danza butoh y el teatro experimental, macerarlo en world music toda la noche, sazonarlo con una pizca de arte contemporáneo, rellenarlo con la historia de vida personal y las cargas afectivas de los involucrados, cocerlo a fuego lento bañándolo con litros y litros de provocación y utopía al gusto.

¿Eres capaz de burlarte de tí mismo?, ¿eres capaz de burlarte de lo mundano y lo profano?, ¿eres capaz de mirarte en el "espejo mágico" para conocer tu verdadero rostro? Para abordar el bufón tienes que abrirte y dejar a un lado todo lo que has construido, mirarlo de frente y soltar una gran carcajada, ¡burlarte de eso que crees que eres!... Cuando el actor se atreve burlarse de sí mismo deja de ser actor y se convierte en bufón, sólo entonces sucede la magia y se convierte en espejo que refeja los vicios sociales, la falsa moral y las contradicciones humanas.

¡El bufón es el único que puede ponerse la corona del rey sin que nadie se de cuenta y a la vista de todos!

¡Te esperamos!
Anacoreta Buscoamante